Lo primero, lo primero, es identificar a quién le vamos a hablar, es la única forma de abrir su corazón. Conociendo el target, nos dedicamos a encontrar la data que nos permitirá “convertirnos en el target”, conociendo así el contexto actual en donde se desenvuelve. De esta forma, encontramos los insights; esa cerradura al corazón que lograremos abrir.
Si los insights son la cerradura del corazón del target, nuestra misión es encontrar la llave, por lo que nos dedicamos a entender la data y la cultura en la que se desenvuelve. Así podemos encontrar conceptos creativos lo suficientemente originales y memorables que sean un agente provocador que podamos usar como esa llave que nos permitirá abrir la cerradura y provocar su atención.
Llegó el momento de vestir a nuestro agente provocador, entendiendo y tomando en cuenta la innovación, las tendencias y los formatos actuales. Así es como por medio de nuestro tercer ojo, somos capaces de observar todo lo que se necesita para crear, logrando diseños únicos y provocadores que no solo nos pondrán en el foco, sino que harán que el target se enamore.
¿Y qué viene después?, ¿podemos seguir mejorando? ¡Claro! Buscamos evolucionar constantemente con el target para tener una constante actualización, entendimiento y mejora de nuestro trabajo. Así abrimos corazones, los enamoramos y provocamos conexiones genuinas entre las marcas y su target, buscando crear relaciones de esas que duran años
